Guía del fútbol para los aficionados a los negocios

Guía del fútbol para los aficionados a los negocios

La reciente Copa Mundial de Fútbol en Rusia me ha dejado inspirado. Pero al ser más un’loco por los negocios’ que un’loco por el fútbol’, no puedo evitar intentar establecer paralelismos entre ambos. El fútbol, al igual que el mundo en el que existe, puede ser tan bello, tan feo, tan complejo o tan sencillo como uno quiera que sea. Al igual que los negocios, requiere estrategia, valor, determinación, humildad e inteligencia.

EL NEGOCIO DEL FÚTBOL

El encanto del fútbol es que es fascinantemente sencillo (muy lejos del críquet de competición): hay jugadores cuya misión es marcar goles; hay jugadores que impiden que otros anoten goles; y hay jugadores polifacéticos que lo vinculan todo.

Mientras presenciaba la caída de los titanes nacionales y el ascenso de los desvalidos este verano, el tema recurrente que surgió es la importancia de un equipo equilibrado, y no depender de una o dos superestrellas. Un equipo de fútbol tiene algunos paralelismos espeluznantes con el organigrama de un negocio. Los huelguistas son los vendedores, tratando de hacer tratos. Los centrocampistas son los de operaciones. Conectan a todos como la columna vertebral del equipo y se aseguran de que las cosas funcionen sin problemas.

Los defensores son su departamento financiero; son los responsables sensatos que mantienen las cosas firmes y tratan de minimizar las fugas. El portero es su Director Financiero, la última línea de defensa. El entrenador de fútbol es su director ejecutivo. Toda la culpa y la gloria recaen finalmente sobre sus hombros. Cuando las cosas salen mal, se espera que respondan por todos los errores. Cuando las cosas van bien, la presión se alivia ligeramente, pero el trabajo es una existencia agotadora, tambaleándose en un filo de cuchillo, sólo una derrota lejos de su posición está en peligro.

LIDERAZGO DEPORTIVO

Dirigir un equipo de fútbol tiene que ver con el dinamismo, tener las habilidades suaves para inspirar y motivar cuando la moral está baja y la dureza para reprimir cuando hay un lapso en la ejecución. El equipo del gerente debe creer en su visión. Esto no es diferente al CEO de un negocio en sus inicios. Nos arriesgamos y los vemos jugar para que el mundo los vea, sin que nadie tenga la culpa de la derrota salvo nosotros mismos. Tenemos que contratar a personajes capaces y descubrir lo que los hace funcionar. Tenemos que presionarles, pero retirarnos si creemos que hemos ido demasiado lejos.

Sir Alex Ferguson es considerado por muchos como uno de los mejores entrenadores de fútbol de este siglo. Era un maestro en la gestión del hombre, y mantuvo a algunos personajes extremadamente fogosos actuando en su mejor momento año tras año. Motivar el talento de clase mundial requiere intuición y empatía, y tener una habilidad natural para leer y entender a las personas. No es algo que se pueda producir fácilmente en masa; el enfoque debe evolucionar con cada personaje que intentes mantener motivado.

El papel del CEO del empresario no es diferente – la principal prioridad es obtener el rendimiento de un equipo de primera. Los mejores jugadores se aburren fácilmente, necesitan ser desafiados constantemente y a menudo son casi arrogantes. A menudo es un desafío asegurarse de que los miembros del equipo se queden quietos y no sean atraídos a pastos más verdes (más dinero, una mejor oportunidad de ganar, etc.). El CEO debe buscar talentos como un buen gerente – deben ser capaces de reconocer el talento cuando lo ven, saben que vale la pena, invierten en él y, lo más importante, se aferran a él.

DEPORTES DE EQUIPO

Los negocios y el fútbol son deportes de equipo. Los trofeos no son ganados por jugadores estrella individuales, sino por equipos bien equilibrados que trabajan juntos sin problemas como una máquina finamente afinada. El ego de los mejores a menudo les lleva a poner su propio rendimiento percibido por encima del mayor bien del equipo, pero tristemente el resultado final es demasiado a menudo confuso e inepto.

Los efímeros viajes del Brasil de Neymar y de la Argentina de Messi en el Mundial de este año son un ejemplo de ello. Ambas estrellas jugaron bien en equipos que, deplorablemente, tuvieron un rendimiento inferior. Croacia, por su parte, mostró un excelente trabajo de equipo, sorprendiendo a sus compatriotas y al mundo al salir del olvido y entrar en la gloria de la fase final. Trato de llevar esta mentalidad deportiva a la creación de equipos nuevos. ¿Estoy buscando estrellas? Absolutamente. Pero más aún, busco el equilibrio, la química, el trabajo en equipo y los valores.

PENSAMIENTOS FINALES

Las semifinales de este año proporcionaron un suspense desgarrador a millones de aficionados de todo el mundo. ¿Aceptaría Inglaterra el fútbol de pases tácticos del seleccionador Southgate o volvería a su antiguo estilo? ¿Podría la agresión de Croacia romper por fin nuestra bien entrenada defensa? Este fue un concurso de “edge-of-yoat” en su mejor momento, que nos remonta a los días en que los gladiadores romanos estaban rodeados de una arena de juerguistas sedientos de sangre.

Leave comment

Your email address will not be published. Required fields are marked with *.